Glucosa

La glucosa es una sustancia que se encuentra estrechamente relacionada con los niveles de azúcar, es considerada como la principal fuente de energía del organismo y se puede adquirir mediante el consumo de los alimento, ésta tiene la capacidad de convertirse en energía, la cual va a ser dedicada al cumplimiento de las diferentes funciones del organismo. Durante el metabolismo este compuesto sufre una oxidación metabólica, dando como resultado la obtención de otros compuestos como el agua, dióxido de carbono y otros elementos nitrogenado. Esta posee una tonalidad pálida y cristalina, con bajo contenido de alcohol y soluble en agua y se puede obtener en la naturaleza en variados alimentos.

La glucosa es considerada como la sustancia que más abunda en la naturaleza, siendo la principal fuente de síntesis energética de las células, utilizando para ello la oxidación metabólica, sin mencionar que es uno de los principales elementos que conforman polímeros estructurales y de almacenamiento como la celulosa, glucógeno y almidón. Es considerada además junto a la galactosa y fructosa como un monosacárido de tipo dietético, éstas tienen la capacidad además de ser ingresadas de manera directa en el sistema circulatoria durante el proceso de digestión de los alimentos. La glucosa además de ser utilizada como fuente de energía sirve como un mediador en el metabolismo.
Es importante resaltar que la glucosa es uno de los resultados que se obtiene mediante la fotosíntesis, siendo un compuesto esencial para que se lleve a cabo la respiración de las células. Para poder obtener glucosa se debe iniciar con la ingesta de alimentos que la contengan, luego los ácidos estomacales, se encargan de descomponer dichos alimentos y el organismo se encargará de absorber los diferentes compuesto resultantes, los cuales serán trasladados por el torrente sanguíneo, la glucosa en este caso será trasladada al hígado, donde será transformada en energía, mediante lo que se conoce como respiración celular, en el cual la insulina se encargará de permitir si la glucosa entrará o no en las células, que en caso de que no lo permite es muy posible que se presente la diabetes. Los niveles de glucosa en sangre, considerados normales son entre 70 y 100 mg, de la glucosa cada decilitro de sangre.