Carrera

Dependiendo de la aplicación que se le ofrezca, la palabra carrera puede hacer referencia a una diversidad de conceptos, varios de los cuales no guardan ningún tipo de relación con los otros.
En primer lugar se debe mencionar que como carrera se conoce a la acción y efecto de correr, siendo ésta la manera más rápida como los seres humanos y los animales pueden movilizarse por sus propios medios de un lugar a otro.
Mientras que en el ámbito deportivo, una carrera se refiere al paso acelerado en el que durante instantes ninguna de las partes que conforman el cuerpo del atleta mantiene contacto con el suelo, siendo éste un ejercicio particular, ya que al mismo tiempo desempeña funciones aeróbicas y anaeróbicas.

También se puede definir carrera como el desarrollo de la orientación que un trabajador escoge para el devenir de su vida laboral.
En ese orden de ideas, la plantación de carrera se refiere al proceso permanente y sistemático, a través del cual una persona establece sus objetivos y reconoce cuáles son los recursos de los que dispone (y cuáles debe conseguir) para cumplirlos.
Por otro lado, se conoce como ruta de carrera a la línea de movimiento moldeable que es utilizada por un individuo durante el tiempo que pertenezca como empleado a una organización determinada.
Mientras que, el desarrollo de carrera está relacionado con los parámetros formales que son fijados por las empresas para determinar si entre su personal se encuentran los profesionales que poseen las habilidades y competencias necesarias para alcanzar las metas creadas por la compañía.
También puede hablarse de la existencia de planeación y desarrollo de carrera, lo cual se refiere a la disposición que poseen las organizaciones de coadyuvar a sus trabajadores a que se fijen objetivos de carrera realizables y ofrecerles las herramientas para que puedan cristalizarlos.
Esa ayuda puede derivar del estímulo económico necesario para que un trabajador determinado consiga la oportunidad de especializarse en un área de la que tenga dominio, en el entendido de que esa formación redundará en el futuro en beneficios para la propia empresa, es decir, los conocimientos que el empleado obtiene en la planificación y desarrollo de su carrera, deben ser directamente proporcionales a las mejoras integrales de la compañía, pues con ese objetivo se realiza la inversión en la profundización del nivel técnico de quien se somete a la instrucción en cuestión.